Este asunto de escribir un libro... ¿por dónde empieza...? donde termina...? ¡¡Vas a saber!! Porque con nosotros, que somos de Minas Gerais, las cosas simplemente suceden, parece como si estuvieran ahí hace mucho tiempo... y que nunca se nos van... Imagínese la complicación en nuestra cabeza, de inventar para escribir un libro sobre Quesos Especiales... en una tierra bendita donde cada queso... es especial!! Y fue en este maldito lío en el que me metí cuando, sospecho, por obra de algunos espíritus escandinavos pálidos y susurrantes, decidí escribir este libro que tú, tranquilo y en la paz del Dios santo, ahora tienes en tus manos. ... Así es... allí en Minas Geraes, donde nací, hay estas cosas, estos trenes que marcan nuestras vidas... allí en Minas Geraes hay muchas gotas, es verdad... pero allí también son “gotas”... si señor, “gotas”! De esos que gotean, por desconcertantes, diminutas eternidades... porque estas zonas escondidas de Minas Gerais guardan su magia, su quebrantamiento y su encanto... incrustados en una alquimia casi medieval y en insondables secretos coloniales... así es, ahí nació , ya sabes, si se quiere, la “gota” impenetrable, enclavada en su cuna de cocina... arrullada por sinfonías de cascadas escondidas en la portentosa Serra da Canastra... adornada de árboles de hoja perenne en las alturas de Serro, allí en la lados de Diamantina, donde más de un bandeirante, entre delirios de turmalinas, se perdió... velado en las montañas del Salitre por queseros de voz suave y ojos rasgados...